El gran «ayuno» se está practicando al sur de Kenia y está siendo llevado a cabo por ordenes de el líder religioso de la Iglesia Internacional de la Buena Nueva.
Noticias mundo.
Aumentan y siguen aumentando el número de presuntos miembros de una secta religiosa al sur de Kenia, quienes ayunaron hasta la muerte, con el prexteto de encontrarse con Jesucristo.
Hasta este lunes, el número alcanzó las 58 personas, informó el inspector general de la Policía keniana, Japhet Koome a EFE, quien se encuentra en el bosque de Shakahola, donde se exhumaron los cuerpos.
«Hasta ayer (domingo) se había confirmado la muerte de 47 personas. Sin embargo, hoy tenemos 11 adicionales, lo que hace un total de 58 personas muertas confirmadas», afirmó Koome.
«Condenamos enérgicamente cualquier forma de organización religiosa que promueva creencias extremistas y opere fuera de los límites de la ley», dijo el alto mando policial.
Bodies of the 58 followers of the Good News International Church in Kenya were exhumed from forests near the church belonging to pastor Paul Makenzie Nthenge, who is in custody and awaiting court appearance pic.twitter.com/V5AJOZdMyM
— TRT World Now (@TRTWorldNow) April 24, 2023
Primeros reportes
Desde el 14 de abril, las autoridades encontraron los restos de cuatro adeptos de la Iglesia Internacional de Buena Nueva, dirigida por Paul Mackenzie Nthenge.
Este personaje ya tiene un historial criminal por sus controvertidas prédicas, como convencer a varios niños de no ir la escuela, porque la educación no estaba reconocida en Biblia o la inanición de dos niños, pero salió de prisión tras pagar una fianza de 700 euros.
Esta vez fue muy lejos al instar a sus seguidores a ayunar hasta «conocer a Jesús».
Ese día, otras 11 personas fueron rescatadas y hospitalizadas. Pero los macabros hallazgos siguieron y desde el viernes ya suman 58 los cuerpos recuperados.
Sin embargo y por su parte, el «líder» de esa secta dijo a las autoridades que si buscan, encontrarán a más de mil personas que fueron a «encontrarse con Jesús”.
Autoridades
Entre tanto, el presidente de Kenia, William Ruto, dijo este mismo lunes que la búsqueda de cadáveres sigue y que esperan encontrar posibles sobrevivientes.
Esto se debe a que en el bosque acordonado, de 300 hectáreas, aún permanecen sobrevivientes que se han negado a ser asistidas cuando son encontradas por las autoridades.
«Lo que estamos viendo en (el distrito costero de) Kilifi es un tipo de terrorismo», dijo el mandatario.
Ruto señaló que el pastor de la iglesia «debe estar» en una cárcel.
«Los terroristas utilizan la religión para promover sus atroces actos. Personas como Mackenzie utilizan la religión para hacer exactamente lo mismo», sostuvo.
Por su parte, la Cruz Roja de Kenia informó que ha recibido la denuncia de al menos 112 personas desaparecidas en la zona.
«Pedimos al Gobierno Nacional a enviar tropas al terreno para que podamos ir al interior del bosque) a socorrer a las víctimas que siguen ayunando hasta la muerte», pidió Hussein Khalid, miembro de Haki Africa, organización que alertó a la policía sobre las actuaciones de la iglesia.