Foto tomada de X @KatiePavlich
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El caso de Laken Riley cambió la política migratoria de EE.UU., dando origen a una ley que divide entre seguridad y derechos.

El nombre de Laken Riley quedó grabado en la memoria de Estados Unidos no solo por la tragedia que la rodeó, sino porque su historia se convirtió en el punto de partida de un profundo cambio en la política migratoria del país.

Riley, una joven estudiante de enfermería de 22 años, fue asesinada en febrero de 2024 en el estado de Georgia. El responsable del crimen, José Ibarra, un migrante venezolano en situación irregular, tenía antecedentes de robo y hurto, pero nunca había sido deportado.

La Ley Laken Riley: una respuesta legislativa a la tragedia

Menos de un año después del crimen, el Congreso aprobó la Ley Laken Riley, una legislación impulsada por el Partido Republicano y firmada por el presidente Donald Trump. La norma establece nuevas reglas en materia migratoria, incluyendo la detención obligatoria de inmigrantes indocumentados con antecedentes, incluso por delitos menores como hurto o robo.

Además, otorga a los estados mayor poder para demandar al gobierno federal si consideran que no está aplicando adecuadamente las leyes de inmigración. También permite que fiscales estatales impugnen la liberación de migrantes bajo custodia y bloqueen visados a países que se nieguen a recibir a ciudadanos deportados.

Para sus defensores, esta ley representa un avance en seguridad, evitando que casos como el de Riley se repitan. Para sus críticos, la norma pone en riesgo el debido proceso y puede generar una aplicación desproporcionada de la justicia contra las comunidades migrantes.

¿Justicia o herramienta política?

El asesinato de Laken Riley conmocionó a la sociedad estadounidense, pero también se convirtió en un punto clave en el discurso político de Trump y el Partido Republicano. Durante su campaña, el expresidente utilizó su caso como símbolo de la necesidad de una política migratoria más estricta, impulsando una legislación que ahora enfrenta tanto respaldo como controversia.

Grupos defensores de los derechos de los migrantes advierten que la ley podría criminalizar a personas sin condena previa, lo que viola la presunción de inocencia. Además, temen que se utilice como una herramienta política para endurecer aún más la retórica antiinmigrante.

Por otro lado, los padres de Laken Riley, presentes en la firma de la ley, agradecieron el esfuerzo legislativo, destacando que su hija ahora deja un legado que, según ellos, evitará futuras tragedias.

Con información de BBC News.

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Escrito por: Karol Serna

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